¿Qué es la osteopatía y cómo funciona?
La osteopatía es una terapia manual centrada en el diagnóstico y tratamiento de disfunciones corporales. Su enfoque holístico considera al cuerpo como una unidad, donde la relación entre músculos, ligamentos, articulaciones y órganos internos es fundamental para el bienestar general.
A través de técnicas manipulativas como movilizaciones articulares, estiramientos miofasciales y ajustes suaves, los osteópatas buscan restaurar el equilibrio natural del cuerpo. Esto no solo alivia dolores musculares y articulares, sino que también mejora la circulación, la movilidad y la función de sistemas internos.
La osteopatía también incluye recomendaciones sobre hábitos posturales, actividad física y alimentación, promoviendo una recuperación integral. Su objetivo es activar los mecanismos de autocuración, abordando tanto problemas físicos como su impacto global en el organismo.
Preguntas frecuentes
Indicaciones
Los pacientes no necesitan venir a través de la recomendación de un médico pero siempre que se pueda se trabajará conjuntamente con ellos u otros terapeutas de la salud. Puede ser complementaria o totalmente alternativa sino se ha encontrado ningún resultado.
Siempre se hace un histório clínico preguntando la história y antecedentes del paciente, seguida de una exploración y acabando con una valoración funcional y un tratamiento terapéutico.
Está indicada para:
- Problemas relacionados con el sistema músculo-esquelético y nervioso debidos a la edad, caídas, accidentes de tráfico y malas posturas como artrosis, hernias discales, latigazos cervicales, torticolis.
- Trastornos digestivos, circulatorios y respiratorios como otitis y estreñimiento.
- Lesiones deportivas, preparatorio a eventos deportivos o relajación después de ellos, mejora el rendimiento deportivo, hace una buena puesta a punto y recupera mejor al deportista después del esfuerzo inicial.
- Pre y postoperatorio, mejora las condiciones para enfrentarse a una operación y mejora más rápidamente.
- Problemas del embarazo, trastornos pediátricos.
- Problemas ginecológicos y urinarios.
- Estrés, cefaleas y migrañas.
Contraindicaciones
En si no es una terapia que de efectos secundarios, aunque los aparatos que se utilizan están desaconsejados en una serie de patologías, algunos ejemplos:
- Procesos inflamatorios, infecciosos o víricos, fiebre.
- Fracturas en proceso de consolidación (cuando es la zona a tratar).
- Tumores, cáncer.
- Pneumotorax, enfisema pulmonar, distres respiratorio, broncoespasmo en estado agudo.
- La osteoporosis es una contraindicación relativa.
- Hemorragias, alteraciones de la coagulación, tromboflebitis.
- Infecciones cutáneas.
Condiciones sistémicas que constituyen contraindicaciones relativas para las técnicas directas
- Osteoporosis
- Osteopenia
Contraindicaciones absolutas para la aplicación específica y local de las técnicas directas
- Aneurisma aórtico
- Heridas abiertas, trastornos de la piel, cirurgia reciente
- Hidrocefalia aguda
- Hidrocefalia sin diagnóstico diferencial
- Hemorragia intracerebral aguda
- Isquémia cerebral aguda, incluyendo isquémia transitoria
- Sospecha de malformación arteriovenosa cerebral
- Aneurisma cerebral
- Colecistitis aguda con sospecha de fuga o ruptura
- Apendicitis aguda con sospecha de fuga o ruptura
- Lesión cranial cerrada aguda o subaguda
- Hernia discal intervertebral aguda con signos neurológicos progresivos
- Sospecha o evidencia de compromiso vascular
- Sospecha de compromiso de la arteria vertebral
- Malformación congénita
- Síndrome agudo de la cola de caballo
- Implante de lente ocular (primer período postoperatorio)
- Glaucoma no controlado
- Neoplasia
- Sospecha de compromiso óseo, como en la osteomielitis, la tuberculosis ósea, etc., o riesgo de la misma
Contraindicaciones absolutas para la aplicación específica y local del "thrust" o de la técnica de impulso
- Técnica específica sobre una articulación con fijación interna quirúrgica
- Huesos o articulaciones con estabilidad comprometidas, como puede ocurrir en focos neoplásicos, enfermedad metastásica, artritis supurativa, artritis séptica, enfermedades reumáticas, osteomielitis, tuberculosis ósea, etc.
- Fractura aguda
- Hematoma o absceso óseo o intramuscular
Visitas
Las visitas se aconsejan dos o tres veces por semana, para obtener unos resultados óptimos a partir de les 10 sesiones aproximadamente. Después de las sesiones se puede sentir cansancio o malestar general, parecido a un proceso vírico.
Bonos
Bonos de 5 sesiones
- 6 meses caducidad
El bono es solo para el titular, pero si el bono esta vigente y lo quiere utilizar un familiar, se le cobrará la consulta pero a precio bono.